Lo primero que me dice cualquier persona interesada en transformar su físico es que quiere perder grasa y ganar músculo y quieren hacerlo a la vez. Pues esto no es posible de forma natural. Para crear músculo el cuerpo necesita un superavit calórico para poder crear músculo, ya que no puede crearlo de las reservas de grasa ya que necesita los aminoácidos de la proteína que no se almacenan y deben suministrarse de forma exógena diaria.
Para perder grasa sin embargo, debe haber un déficit calórico para utilizar esas reservas de grasa como fuente de energía.
Ahora bien, ¿qué hago? Gano primero músculo o pierdo grasa, ya que como vemos, hay que hacerlo en dos fases.
Pues depende: si tu porcentaje de grasa es superior al 15% debes empezar haciendo una fase de definición basada en ejercicio cardiovascular con pesas para quemar grasa y mantener la masa muscular junto con una dieta con un ligero déficit calórico.
Hay muchas personas que dicen: si encima que no tengo músculo voy a perder grasa, voy a perder volumen (ya que la grasa ocupa volumen) entonces me voy a ver más pequeño todavía y no quiero, así que voy a empezar a ganar músculo directamente.
¿Qué ocurrirá en este caso?
Mientras más alto estemos de grasa, nuestra testosterona estará más baja y sintetizaremos menos proteína para crear músculo, tendremos menos fuerza para entrenar duro, nuestros niveles de cortisol serán más altos, haciendo imposible ni ganar músculo ni perder grasa, el estradiol elevado y retendremos más líquido…por lo que es como si queremos ganar una carrera con un motor estropeado, primero hay que arreglarlo para que esté en el entorno adecuado para ganar la carrera.
Al descender nuestros niveles de grasa corregimos esto y cuando estemos en torno a un 10-11% de grasa podemos empezar a ganar músculo, tras una fase de estabilización de algunas semanas (un error muy común es conseguir estar en un bajo porcentaje de grasa, no esperar ni una semana y subir muchísimo las calorías, lo cual hace que el cuerpo no se haya adaptado a su nuevo nivel de grasa y metabolismo y cojamos un rebote de retención de líquidos y grasa importante).
En un año si deseamos añadir algunos kilos de músculo o decenas, necesitaremos varios años y repetir este proceso de definición-ganancia de masa muscular, el que siempre, independientemente de la fase en que nos encontremos estaremos en torno al 9-15% de grasa.
Dependiendo de si eres de metabolismo rápido de por sí, podrás estar en un porcentaje menor todo el año, y si eres de metabolismo lento y engordas con facilidad estarás un par de puntos por encima.
Ya por fin se descubrió y se dieron cuenta que esas fases de volumen donde uno ganaba 20 kilos siendo más del 60% grasa era totalmente un error, además de las antiestéticas estrías que prevalecen para siempre (y ya que queremos tener un físico bonito no hay que arruinarlo con estrías en la medida de lo posible), un estrés metabólico y hormonal muy alto y que no tiene el cuerpo la misma facilidad para mantener una masa muscular si tiene que bajar sólo 4 kg para que se vean perfectamente los serratos y abdominales que 15kg, en el último caso se arrastrará masa muscular en el proceso por muy bien que se hagan las cosas, además de ser una tortura el tener que hacer una fase de definición de varios meses.
Así que visualízate donde estés y ya sabes qué estrategia debes seguir tanto a corto como largo plazo 🙂